Perfumeria Júlia, Vilanova i la Geltrú

Ayer fui a la perfumería Júlia de Vilanova I La Geltrú, a devolver un regalo que me hicieron, en el cual estaba en perfecto estado, bolsa de compra, tíquet, embalaje y perfume intacto, pues la respuesta de la encargada es que no me la cambiaba, 74€ a la basura… Primero de todo no recibí ni un saludo, estaban paradas y yo esperando para ser atendida y aún así hasta que no dije yo perdona, no fue capaz de atenderme tal encargada ni ninguna trabajadora de las cuales en ese momento no estaban ocupadas. Una vez atendida por la encargada, en la cual me dirigí en todo momento con educación, ya que también trabajo de cara al público y sé que es trabajar en tienda, total que decía que no me lo cambiaba y le justifiqué la devolución y comenzó a hablarme mal, incluso llevándome a decir que le hablara yo bien, cuando en ningún momento fui yo, más bien lo contrario, pues hasta que no dije dame una hoja de reclamación, porque mi familia se ha gastado mucho dinero aquí en más de una ocasión y el trato no ha sido agradable y extraña ya que es una perfumería de Gama supuestamente, pues hasta que no le dije dame una hoja de reclamación no se digno a cambiarme el perfume. El trato nefasto, después le pregunto por un perfume que tiene varios y no sabía cual era la mas dulce o dulce, su respuesta… a desgana, todas son dulces, sigo sin entender, pues yo entiendo que hay clientes y clientes, pero sí estoy siendo súper educada, lo mínimo que puedes hacer es atender con la misma educación que el cliente le está dando, en fin, ha perdido una gran clientela, pues toda mi familia no volverá a ir, ni la recomendaré a nadie, ojalá este mensaje llegue a manos de alguien y al menos pongan un poco de educación a tal encargada.

Quiero dejar claro que siempre que vamos a Andorra compro en esta cadena de perfumerías,pues encuentro una gama alta de productos que en otras tiendas no tienen, pero cada vez que entro en la perfumería julia de vilanova i la geltrú quedo realmente decepcionada con el trato que te dan las chicas que trabajan, sinceramente no están a la altura y creo que deberían dedicarse a otra cosa que no sea atender detrás de un mostrador, pues trabajan sin ganas y parece que les moleste que les pregunten, por ese motivo no compro nunca nada, prefiero desplazarme aunque no me valla bien.