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El consumo de pan en las dietas de adelgazamiento permite la pérdida de peso en igual medida que en los regímenes que lo excluyen y reduce a su vez el riesgo de abandono de la dieta, según un estudio de la Unidad de Nutrición del Hospital de La Paz de Madrid.
Debido a "falsos mitos" el pan y los alimentos ricos en hidratos de carbono se eliminan o restringen cuando se quiere perder peso, pensando que así la dieta será más efectiva. Esto es un error, el pan, como todo alimento, engorda si nos excedemos en su consumo, pero comiendo un buen pan y de forma moderada, no tiene porque ser eliminado de nuestras vidas durante un periodo de tiempo para “adelgazar”, pues este ayuda en la dieta.
Hay que concienciarse de que comerse un bocadillo de pan no es malo, pues no engorda el pan, si no lo que añadimos a este; chorizo, jamón, sobrasada…eso es lo que engorda.
En muchas dietas observamos: -2 tostadas de pan con aceite… si el pan engordase tanto, nadie recomendaría nutricionalmente unas tostadas, ya que estas evidentemente, son pan.
El pan en la alimentación no debe ser sustituido por ningún otro alimento, pues los componentes y el carácter nutricional del pan no pueden sustituirse.

Beatriz Donnay  
Técnico superior en nutrición y dietética