Embajada de La República de Finlandia, Madrid

Además, Finlandia tiene trece Cónsules Honorarios de nacionalidad española en distintas partes del país. Los cónsules honorarios son personas bien relacionadas con las autoridades locales y el mundo comercial. Representan a Finlandia en sus zonas de jurisdicción y ayudan a los ciudadanos finlandeses en asuntos de carácter consular. Los cónsules honorarios no están remunerados.
La Embajada colabora estrechamente con la Oficina Comercial de Finlandia (Finpro), con el Instituto Iberoamericana de Finlandia, con la Cámara de Comercio Hispano-Finlandesa y con la Iglesia Evangélico-luterana de Finlandia en España.
En la primavera de 1936 se constituyó un gobierno popular en Madrid, que despertó descontento entre los oficiales del ejército. Al mando del General Francisco Franco el ejército se sublevó el 18 de julio de 1936. En septiembre el encargado de negocios de Finlandia se trasladó a Portugal. Al terminar la guerra el gobierno de la República de España tuvo que exiliarse y Francisco Franco se convirtió en el Jefe de Estado. Finlandia reconoció el nuevo gobierno el 31 de marzo de 1939. Despues de la Segunda Guerra Mundial Finlandia no rompió las relaciones diplomáticas con la España de Franco, pero a partir de diciembre 1942 Finlandia solamente tuvo representación consular en España. A su vez el Embajador de España en Helsinki estaba oficialmente ausente de 1946 a 1952. Finlandia nombró un nuevo encargado de negocios en España en 1955 al normalizarse las relaciones diplomáticas. Desde aquella fecha las relaciones han sido fructíferas y se ha consolidado un intercambio a todos los niveles. La entrada de España y de Finlandia a la Unión Europea es un hecho que indudablemente a contribuído a acercarnos aún más.